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HIERBA DE TRIGO: nutrientes fundamentales para una buena salud.

03/09
Puede ayudar a normalizar la presión sanguínea, la digestión y promover la desintoxicación general del cuerpo. Entre todos los cereales, el trigo (Triticum aestivum) tiene una especial distinción: contiene todos los elementos esenciales para la vida humana. Todas estas vitaminas, minerales, proteínas y almidones, se encuentran en forma balanceada en el grano del trigo. Cuando el trigo brota, todos estos nutrientes aumentan y, a través de la activación de enzimas, también se vuelve más fácil de digerir. El jugo de hierba de trigo recién germinado contiene altas cantidades de una gran variedad de vitaminas como A, B, C, y E, así como minerales como sodio y potasio, contiene además casi la mitad más de hierro que las espinacas o acelgas, pero sin el ácido oxálico, magnesio, fósforo y oligoelementos tales como selenio y zinc. El jugo de hierba de trigo es la comida verde más fresca que se puede consumir, dijo Aaron Matsil de Alimentos Perfectos, una empresa con el sistema de crecimiento interior más grande del mundo y todo un sistema de distribución fuera de la ciudad de New York. “Siguen creciendo hasta el minuto que son consumidos”, señaló Matsil. “¿Por qué harías jugo de hierba de trigo?, simplemente porque no lo tienes que procesar, no está pasteurizado y tiene nutrientes vivos que no serías capaz de obtener de ningún zumo envasado”, señaló Matsil. “Tiene micronutrientes en el que están intactas las enzimas, todavía están activas y no han sido desnaturalizadas por el procesamiento y por lo tanto aún son capaces de actuar en tu cuerpo y ser absorbidas, en comparación con otros micronutrientes que normalmente se disiparían rápidamente después de procesar los alimentos”. Contiene alrededor del 70% de clorofila, el jugo de hierba de trigo se conoció por algún tiempo simplemente como “clorofila líquida”. La hierba de trigo puede ayudar a normalizar la presión sanguínea, la digestión y promover la desintoxicación general del cuerpo. El proceso de germinación tarda de 7 a 10 días, en el que la joven hierba de trigo se puede cosechar y hacer jugo. Un exprimidor especialmente diseñado se utiliza para moler la hierba, hacer la extracción del jugo y la preservación de los nutrientes esenciales, enteros y vivos. El padre de Matsil, Harley Matsil, comenzó su compañía en un sótano en Brighton Beach, Brooklyn, en 1982, cuando la hierba de trigo era popular en California, pero no era popular en la ciudad de Nueva York. Su compañía fue la pionera en el uso de la hierba de trigo en el área de Nueva York. A través del boca a boca tomó una dimensión humilde pero que ahora está creciendo y produce hasta 3.000 bandejas a la semana, entregando todo a tiendas naturistas y bares de jugos, y también a algunos hogares. El crecimiento de la hierba de trigo interior permite un mejor control de los factores, así como mayor control de luz (mayor conservación para los nutrientes) que las que crecen al aire libre. Durante años, los Matsil escucharon parte de los testimonios de los clientes, informando de los beneficios que experimentaron. “Por lo general, lo primero que la gente comenta después de unos días es: ”lo probé y me sentí con un poco más de energía,… ahora soy capaz de dormir mejor, me desperté más fresco”, dijo Aaron Matsil. Un par de semanas más tarde, se escuchará de nuevo a la gente sentirse mejor en general, y notando la piel más sana, al igual que el cabello y las uñas. Luego está la otra categoría: las personas que reportan mejoras de cualquier tipo de enfermedad degenerativa, el dolor crónico, dolores de espalda, alergias, o problemas relacionados con la piel. “Todo lo que ha sido un problema crónico, se disipa o disminuye”, señaló Matsil. También se escucha con frecuencia sobre la lucha de la gente contra el cáncer. “Estimo que el 15% de los consumidores regulares de hierba de trigo, está luchando contra el cáncer y lo están haciendo en forma perseverante durante muchos años, obteniendo buenos resultados, muy buenos resultados, no todos pero sí la mayoría. La diabetes, el cáncer, la artritis, escuchamos historias todo el tiempo”. Su padre, Harley, relató el caso de un hombre con cáncer linfático, en los primeros días de la compañía. “Me preguntó si podía ayudarle a aprender a cultivar hierba de trigo por su cuenta. Reunimos los suministros (suelo, bandejas nuevas, una botella de nebulización y una luz única) y fuimos a su casa en Spring Valley. “Durante el transcurso de seis horas se le enseñó cómo hacer crecer la hierba de trigo, paso a paso hasta que lo consiguió. No escuché de él por mucho tiempo, se convirtió en su propio proveedor. Un año más tarde me llamó porque necesitaba semillas. Fue entonces cuando me dijo que su doctor le había informado que estaba libre de cáncer. Los médicos dijeron que debía ser un mal diagnóstico, ya que el cáncer generalmente es terminal; sin embargo, tres médicos diferentes coincidían en el mismo diagnóstico. Imposible de creer. Su terapia fue beber 113 gramos de hierba de trigo cada día y no comer carne roja, eso fue todo. Los médicos estaban desconcertados. Unos 20 años más tarde, mientras se hacía una demostración del producto, Harley Matsil oyó que alguien lo llamaba. “Era él, todavía vivo y muy bien de salud”, “ahora con 20 años más desde que lo conocí”. Dijo. “Sigo bebiendo hierba de trigo todos los días”, para el resto del día se quedó a mi lado. Durante la demostración insistió a cada persona que escuche lo que yo decía, asegurando que era cierto y resaltando que la hierba de trigo le había salvado la vida”. Estudios Existen algunos estudios preliminares sobre la hierba de trigo, pero no son muchos y de acuerdo con Aaron Matsil, tienen fallas en el enfoque. “El problema es que la mayoría de los estudios clínicos, cuando hacen un estudio a fondo, son financiados por un instituto de investigación de gran tamaño que cuenta con millones de dólares para tomar posesión de todo el conocimiento sobre el producto, tratando de aislar uno de los factores para sintetizarlo y luego venderlo como píldoras”. Pero la hierba de trigo tiene muchos nutrientes que actúan juntos para obtener un resultado, no necesariamente es una sola cosa, dijo Aaron Matsil. “Dicho esto, los estudios están ahí, son prometedores”, dijo. Los estudios incluyen uno sobre la colitis ulcerosa, otro sobre si la hierba de trigo puede aumentar la oxigenación. En Australia, un médico creó un extracto de hierba de trigo para uso tópico sobre la piel, y le ha reportado buenos resultados. En un estudio piloto publicado en Nutrición y Cáncer en 2007, las pacientes con cáncer de mama que bebieron jugo de hierba de trigo, al día siguiente mostraron una menor necesidad de medicación en la sangre y la medula ósea, durante la quimioterapia, sin disminuir los efectos de la terapia. En otro estudio piloto, publicado en el Indian Pediatric de 2004, los niños con talasemia (una forma hereditaria de anemia, que a menudo requiere transfusiones de sangre), ingirieron 100 mililitros de jugo de hierba de trigo al día. Como resultado, la mitad mostró una menor necesidad de transfusiones. No se observaron efectos adversos. Por favor consulte a su médico personal o a cualquier profesional de la salud sobre cualquier duda que tenga. Libre de gluten La hierba de “trigo” por suerte para los que son intolerantes al gluten, está libre de él. Las alergias al trigo son normalmente una reacción al gluten que se encuentra en el grano del trigo. La hierba de trigo es un vegetal, se tiene que cortar antes que se forme el grano, así que esta parte está libre de gluten. Hay que tomar precauciones, algunas semillas no germinadas, pueden introducirse a la hora de hacer el jugo. Aunque es muy poco probable, para las personas con intolerancia al gluten, es aconsejable que hagan su propio jugo y consulten con su médico o nutricionista antes de añadir a su dieta la hierba de trigo. Asegúrese de no colocar semillas a su extractor. Si compra la hierba de trigo en una tienda de alimentos saludables o barra de jugos, pida a la persona que prepara el jugo que tenga mucho cuidado de no incluir ninguna semilla. Lucas Hughes es un herbolario clásico de occidente y horticultor con sede en Sídney, Australia. Dosis y efectos secundarios Como suplemento nutricional diario se recomienda tomar entre 28 y 56 gramos de jugo de hierba de trigo, preferentemente con el estómago vacío. El mejor método es bebiendo lentamente pequeñas cantidades. Como con todo, es prudente comenzar siempre de a poco y aumentar la dosis paulatinamente. Como parte de un régimen de curación, son adecuadas de 56 gramos a 113 gramos al día. Para las personas con enfermedades degenerativas o que están tratando de mejorar drásticamente su salud, Aaron Matsil recomienda beber hasta 113 gramos al día, para alguien que tiene cáncer, 170 gramos. Los efectos secundarios, como dolores de cabeza, se pueden experimentar cuando el cuerpo comienza a eliminar cualquier materia, toxinas o residuos acumulados. La historia de la hierba de trigo Por muchos miles de años, la humanidad ha germinado semillas para uso medicinal y con el fin de complementar las dietas. El trigo se cultiva desde hace más de 5.000 años y se remonta por lo menos hasta el antiguo Egipto y probablemente a las primeras civilizaciones de la Mesopotamia. Se supone que los antiguos egipcios encontraron las puntas jóvenes frondosas del trigo sagrado y los utilizaron por sus efectos salubres. Manuscritos antiguos chinos registran el uso de semillas germinadas regularmente ya en el año 3.000 a. C., con los usos terapéuticos que incluyen: trastornos digestivos, dolores musculares y sensación de hinchazón. Los pueblos del lejano oriente chino y otros pueblos germinaban las semillas de trigo como parte de su dieta diaria. En tiempos más recientes, el consumo de hierba de trigo en el oeste volvió a surgir en la década de 1930, después de que un químico agrícola estadounidense llamado Dr. Charles Schnabel curó sus pollos enfermos alimentándolos con hierba de trigo recién cortado. No solo recuperaron su salud, sino que su promedio de puesta de huevos pasó de uno cada tres días a un huevo cada día. Schnabel tenía conocimiento de que el ganado vacuno mostró gran aumento de peso cuando se le permitió alimentarse de hierba de trigo en primavera, y el ganado de leche incrementó su producción de leche y grasa en un 30%. Schnabel y otros científicos encontraron que el contenido de nutrientes de la hierba de trigo se encontraba en su nivel más alto justo antes de lo que se conoce como la “etapa de unión” del crecimiento (cuando el primer nudo es visible en la base del tallo, se siente como una protuberancia inflamada). En esta etapa, la concentración de nutrientes está en su apogeo, es más alto que en cualquier otra verdura de hoja verde oscura. En ese momento, Schnabel y algunos inversionistas pasaron a producir comercialmente lo que probablemente fueron las primeras tabletas de multivitaminas del mundo de las hierbas y de los cereales deshidratados (principalmente hierba de trigo). En 1926, otro científico, el Dr. C Saunders, publicó su investigación titulada “El valor nutricional de la clorofila en relación con la formación de hemoglobina” en las Actas de la Sociedad de Biología y Medicina Experimental. La fuente de clorofila para la investigación provino de la hierba de trigo deshidratado proporcionado por Schnabel y esto activó más estudios sobre los efectos de la clorofila en la salud humana, en particular sobre sus efectos desintoxicantes. Las revistas médicas de la época publicaron resultados positivos cuando se incluyeron tabletas de hierba de cereales en las dietas de los pacientes de los ginecólogos, oftalmólogos, dentistas y otros profesionales de la medicina. Los médicos encontraron que las madres humanas producen más leche, rica en vitaminas y nutrientes y bebés más sanos, con una tasa de mortalidad infantil más baja cuando se añadieron tabletas de hierba de cereal a sus dietas. Sin embargo, con la introducción de las vitaminas sintéticas (sintetizado a partir de derivados de petróleo) en la década de 1940, este complejo multivitamínico de hierba de trigo fue dejado de lado por el público en general, quienes optaron por los llamados “milagros de la ciencia moderna”. En la década de 1940, un testimonio de la Dra. Anne Wigmore alega que se curó de cáncer de colon ingiriendo jugo de hierba de trigo y comiendo hojas frescas de hierba de trigo y coles frescas y verdes. Se enteró de las propiedades curativas de la hierba de trigo durante la Primera Guerra Mundial, cuando su abuela usaba la hierba de trigo y otras hierbas para curar a los soldados heridos en el pueblo europeo que la vio nacer. En “The book of Wheatgrass” (El libro de la hierba de trigo) Wigmore escribe: “Si usted sufre de fatiga crónica, sinusitis, ulceras, o una enfermedad más grave como el cáncer, un extracto de clorofila de pasto de brotes de trigo de siete días de vida, pueden ayudar, incluso cuando otros medicamentos han fallado. Por supuesto nada puede sustituir una dieta sana, ejercicio y una actitud positiva para mantenerse en perfectas condiciones. La hierba de trigo puede darle energía y fuerza para ayudar a tener un mejor control de su salud”. http://www.lagranepoca.com/archivo/28714-hierba-trigo-nutrientes-fundamentales-para-una-buena-salud.html
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