El árbol del sauzgatillo es originario del Mediterráneo y de Asia Central. Sus bayas se han usado por mucho tiempo para una variedad de anormalidades, entre ellas la "deficiencia de cuerpo lúteo", mastalgia (dolor de seno) y anormalidades menstruales.
El sauzgatillo ha mostrado que inhibe la secreción de prolactina al aglutinarse de manera competitiva a los receptores de dopamina. La evidencia disponible indica que el sauzgatillo puede ser una opción efectiva de tratamiento para afecciones hiperprolactinémicas (niveles elevados de prolactina sérica) y el síndrome premenstrual. El sauzgatillo no parece afectar los niveles de la hormona luteinizante o de la hormona folículo-estimulante.
En la actualidad, los ensayos clínicos han encontrado que el tratamiento con sauzgatillo se ha tolerado bien con efectos secundarios mínimos.
La fruta seca de las plantas de sauzgatillo se han usado por miles de años como un medio para tratar varias dolencias que van desde impotencia hasta dolores de seno. Fue popular en la Grecia y Roma antiguas para ayudar a promover el celibato. En tiempos más recientes, el sauzgatillo ha ganado reconocimiento por su éxito para aliviar algunos signos y síntomas de hiperprolactinemia y síndrome premenstrual. Se cree que tiene un efecto normalizador del ciclo menstrual, y se ha empleado con éxito para tratar tanto la amenorrea (ausencia de menstruación) como la menorragia (menstruación abundante)...