Un alto nivel de omega 3 (PUFA) en sangre puede disminuir el riesgo de pequeños infartos y otras anomalías del cerebro que están vinculados al deterioro cognitivo en los ancianos, según una nueva investigación.
El estudio, publicado en el diario de la American Heart Association, investigó la
asociación entre el fosfolípido plasma omega‐3 AGPI y las anomalías
cerebrales subclínicas en resonancia magnética (MRI). Investigaciones
anteriores han vinculado una mayor ingesta de ciertos peces a una reducción
de tales anomalías cerebrales subclínicas - que pueden causar la pérdida de
habilidades de pensamiento y se asocian con un mayor riesgo de demencia y
accidente cerebrovascular.
Dirigido por el profesor Jyrki Virtanen desde la Universidad de Finlandia
Oriental, los datos analizados de más de 2.000 personas mayores que fueron
seguidos durante cinco años - encontrando que aquellos que tenían un estatus
de omega-3 alto en suero tuvieron alrededor de un 40% menos riesgo de
infartos cerebrales pequeños en comparación con aquellos con bajo contenido.
El estudio también encontró que personas que tenían un alto estado de omega-
3 también tuvieron menos cambios en la materia blanca de su cerebro después
del período de cinco años...